Un producto que pides en línea pasa por varias etapas antes de llegar a tu puerta. Un pequeño negocio podría recuperar el artículo de un área de almacenamiento, registrar manualmente los detalles, empacar y entregar el producto a un transportista.
Pero las grandes marcas utilizan extensas redes de almacenes, donde los artículos se mueven por estanterías, cintas transportadoras y muelles de carga, mientras se catalogan, almacenan y preparan electrónicamente para su envío.
Una logística de almacén bien ejecutada puede asegurar un procesamiento de pedidos más rápido, costes más bajos y una mayor satisfacción del cliente. Por el contrario, una logística de almacén ineficiente puede resultar en envíos retrasados, errores en los pedidos y mercancía dañada.
A continuación, verás cómo mejorar la logística de tu almacén para evitar problemas, reducir costes y mejorar la satisfacción del cliente. Aprende con consejos y tecnologías para optimizar tu gestión de inventarios, procesos de selección y empaquetado, y operaciones de almacenamiento.
¿Qué es la logística de almacén?
La logística de almacén se refiere a la gestión del flujo de bienes e información dentro de un almacén, desde la recepción y almacenamiento de inventario hasta la selección, empaquetado y envío de pedidos. Incluye la gestión de inventarios, el procesamiento de pedidos, el manejo de materiales y el control de calidad.
El objetivo de la logística de almacén es mejorar la eficiencia de tu almacén y aumentar la satisfacción del cliente aprovechando el espacio del almacén y reduciendo el tiempo de procesamiento de pedidos.
Logística de almacén vs. gestión de la cadena de suministro
Aunque la logística de almacén y la gestión de la cadena de suministro están muy relacionadas, son conceptos distintos. La logística de almacén se centra específicamente en los procesos y actividades llevados a cabo dentro de un almacén, como la recepción, almacenamiento, selección, empaquetado y envío de mercancías.
La gestión de la cadena de suministro tiene un alcance más amplio. Involucra la planificación, coordinación y control de todas las actividades de la cadena de suministro, desde la adquisición de materias primas hasta la entrega de productos terminados. Incluye la logística de almacén, la gestión de relaciones con proveedores, el pronóstico de demanda, transporte y logística inversa para devoluciones de clientes.
Consejos para mejorar la logística de almacén
- Implementa un sistema de gestión de almacenes
- Optimiza la disposición del almacén
- Agiliza los procesos de selección de pedidos
- Aprovecha la automatización y la tecnología
- Establece procedimientos eficientes para la gestión de devoluciones
- Invierte en la formación y el desarrollo de los empleados
- Controla y analiza continuamente los indicadores de rendimiento
Implementa un sistema de gestión de almacenes
Un sistema de gestión de almacenes (WMS) es un software que mejora y automatiza los procesos de almacenamiento. Ofrece visibilidad en tiempo real sobre los niveles de inventario, el estado de los pedidos y la productividad de los empleados.
Es la base de un sistema de logística de almacén que funciona bien. Los gerentes de almacén lo utilizan para supervisar los inventarios y desarrollar estrategias para mejorar la logística de almacén, como reducir los desperdicios y garantizar la seguridad.
Un seguimiento inexacto del inventario y la falta de información en tiempo real pueden obstaculizar la logística del almacén, provocando decisiones erróneas que conducen a faltas de stock, exceso de inventario y costes mayores.
Implementar un WMS, con funcionalidades como escaneo de códigos de barras, rutas de selección automatizadas y análisis de datos en tiempo real, puede mejorar la eficiencia y la precisión.
Algunas opciones populares de WMS son Oracle’s NetSuite WMS, SAP Extended Warehouse Management, y Blue Yonder’s WMS.
Optimiza la disposición del almacén
Un almacén desorganizado con una configuración ineficiente ralentiza la logística, malgastando tiempo, aumentando los costes laborales y presentando riesgos de seguridad. Por ejemplo, un distribuidor de alimentos podría tener problemas con los productos caducados si no tuviera un seguimiento en tiempo real, lo que le causaría pérdidas financieras y riesgos para la salud.
Para resolver estos problemas, un gerente de almacén puede optimizar la disposición y los sistemas de almacenamiento del almacén. Analizar la disposición actual, identificar cuellos de botella y rediseñar el espacio de almacenamiento puede mejorar la eficiencia.
Algunas estrategias como la selección por zonas, el análisis ABC para clasificar la calidad del inventario, y el uso del espacio vertical con estanterías y sistemas de estanterías pueden mejorar la densidad de almacenamiento y reducir el tiempo de desplazamiento de los empleados.
Agiliza los procesos de selección de pedidos
Las tecnologías como los escáneres de códigos de barras o las herramientas de selección dirigidas por voz pueden minimizar el tiempo de desplazamiento, reducir errores y mejorar la eficiencia general de la selección. Para agilizar la selección de pedidos, plantéate implementar estrategias de selección como la selección por lotes, por oleadas o por zonas:
- Selección por lotes. Este método consiste en agrupar artículos similares y recoger varios pedidos simultáneamente para reducir el tiempo de desplazamiento y mejorar la eficiencia.
- Selección por oleadas. Esta estrategia de selección libera pedidos en oleadas a intervalos predeterminados, permitiendo a los empleados concentrarse en un conjunto específico de pedidos y mejorar la productividad.
- Selección por zonas. Al dividir tu almacén en zonas distintas, con cada empleado asignado a una zona específica, puedes reducir el tiempo de desplazamiento y aumentar la familiaridad de los empleados con los productos de su zona.
Aprovecha la automatización y la tecnología
Los procesos manuales y la tecnología obsoleta pueden causar ineficiencias, errores y falta de control en tiempo real a lo largo de la cadena de suministro. No dudes en utilizar la automatización y la tecnología para superar estos desafíos.
La identificación por radiofrecuencia (RFID), los vehículos guiados automatizados (AGV) y la selección dirigida por voz proporcionan datos precisos en tiempo real. Lo cual te permite rastrear niveles de inventario, controlar indicadores clave de rendimiento (KPI) y mejorar procesos como la recepción, el almacenamiento y el cumplimiento de pedidos.
Además de un WMS, piensa en utilizar sistemas de gestión de transporte (TMS), software de gestión de inventarios, y otras soluciones de software como planificación de recursos empresariales (ERP) y sistemas de gestión de relaciones con clientes (CRM). Las herramientas de automatización física como las cintas transportadoras, las máquinas de clasificación y los sistemas automatizados de almacenamiento y recuperación (AS/RS) también pueden agilizar los procesos de manejo de materiales.
También puedes mejorar la logística de almacén utilizando soluciones de selección por voz para conseguir un cumplimiento de pedidos más rápido. Por ejemplo, un minorista de artículos deportivos podría utilizar soluciones de selección por voz, con trabajadores que usen auriculares que dan instrucciones verbales sobre qué artículos seleccionar y en qué zona del almacén encontrarlos.
Establece procedimientos eficientes para la gestión de devoluciones
Las devoluciones de clientes son comunes por defectos en los productos, pedidos incorrectos o insatisfacción. Una gestión de devoluciones ineficiente puede aumentar los costes y tensar la cadena de suministro de tu empresa. Si tu almacén no tiene un proceso ágil para inspeccionar, reparar o desechar artículos dañados, puedes sufrir un aumento de los costes de almacenamiento y posibles discrepancias en el inventario.
Para establecer una gestión de devoluciones eficiente, desarrolla una política de devoluciones clara que detalle las razones aceptables, los plazos y cualquier tarifa.
Luego, implementa una zona de procesamiento de devoluciones en tu almacén donde el personal pueda inspeccionar, clasificar y determinar la acción adecuada para los artículos devueltos, como el reabastecimiento, el reacondicionamiento o la eliminación.
El escaneo de códigos de barras y los sistemas de gestión de inventarios integrados pueden ayudar a rastrear con precisión los artículos devueltos, actualizar los niveles de inventario en tiempo real y minimizar errores.
Invierte en la formación y el desarrollo de los empleados
Algunas empresas externalizan la logística a proveedores externos, pero para aquellas que gestionan sus propios almacenes, invertir en la formación de los empleados es crucial.
Un personal de almacén mal formado puede causar más errores, manejar incorrectamente productos perecederos, rastrear inexactamente los niveles de stock y aumentar el riesgo de accidentes.
Para abordar estos problemas, implementa programas de formación que cubran protocolos de seguridad, técnicas de manejo de materiales, gestión de inventarios y uso del equipo adecuado. Esto proporciona a los empleados el conocimiento y las habilidades necesarias para cometer menos errores y realizar su trabajo de manera efectiva.
Controla y analiza continuamente los indicadores de rendimiento
Controlar y analizar continuamente los KPI, como la precisión de los pedidos, la rotación de inventario y las tasas de entrega a tiempo, es muy importante para identificar tendencias, cuellos de botella y áreas de mejora. Sin ello, pueden surgir ineficiencias, aumento de costes operativos y problemas para satisfacer la demanda del cliente.
Por ejemplo, una empresa podría establecer un KPI de precisión de pedidos del 99,5 %, pero darse cuenta de que actualmente está en el 95 %. Para solucionarlo, podría implementar un sistema de escaneo de códigos de barras y formar al personal para mejorar las tasas de precisión.
Preguntas frecuentes sobre logística de almacén
¿Cuáles son tres partes clave de la logística de almacén?
Las tres partes clave de la logística de almacén son la gestión de almacenes, las operaciones de almacén y los sistemas de gestión de almacenes.
¿La logística es lo mismo que la gestión de almacenes?
No. La logística es un término más amplio que incluye toda la cadena de suministro, mientras que la gestión de almacenes se centra específicamente en las operaciones llevadas a cabo dentro de un almacén.
¿Cuál sería un ejemplo de logística de almacén?
Un ejemplo de logística de almacén sería utilizar un sistema de cintas transportadoras para trasladar artículos desde la zona de recepción hasta las ubicaciones de almacenamiento correctas, reduciendo el trabajo manual y aumentando la eficiencia.